viernes, 30 de junio de 2006

Si mi voz muriera en tierra

Si mi voz muriera en tierra llevadla al nivel del mar y dejadla en la
ribera. Llevadla al nivel del mar y nombradla capitana de un blanco bajel de
guerra. ¡Oh mi voz condecorada con la insignia marinera: sobre el corazón un
ancla y sobre el ancla una estrella y sobre la estrella el viento y sobre el
viento la vela!
Rafael Alberti


Allí está tu voz, en el nivel del mar. Capitana. Sobre el viento la vela. ¿Que te habrá inspirado? ¿Que estrella tocó tu alma, para que hayas podido combinar las palabras de esta manera? Palabras sencillas, pero que llegan. ¿Quisiste llegar? ¿O simplemente ya te veías allí? ¿Inevitablemente? Gracias, camarada. Debajo del ancla hay un corazón que vuela. Que importa lo que haya encima de la vela.

jueves, 29 de junio de 2006

Música indomable

¿Soy bueno o malo? Soy capaz de sentir amor, me gustaría ser justo, me gustaría ser bueno. Si me lo creyera quizás todo sería distinto. Quizás no debería preocuparme. No comprendo el mal del mundo, el sufrimiento, las contradicciones irreconciliables.
Pero todo eso, y lo repito hasta la saciedad, forma parte del juego que hemos inventado. Ultimamente he pensado que la única religión que me da consuelo y refugio es la de creer en mi mismo.
Siento una fuerza, no se si creativa, que obliga a mi mente a rebelarse ante muchas falsedades. Tiendo a no creer en otra cosa que en mi propio amor; en mi propia verdad, aun sabiéndola egoísta y parcial.
Pero al mismo tiempo voy consiguiendo escapar de mi mismo e irme abriendo poco a poco a cuanto ser me rodea. Creo que todos tocamos un instrumento y que podemos hacer una música que nos libere de fronteras.
Pero debo primero conocer mi propio ego, y si es posible dominarlo.

miércoles, 28 de junio de 2006

A veces voy

Voy bebiendo del agua que me ofrece la vida. Mi alma recibe la lluvia. Me iluminan las estrellas. Disfruto de la luz de la mañana. Intento descifrar el lenguaje de los ojos. Imagino la dulzura de cada labio. Observo la belleza de cada uno.
Y a todos los corono solo con mis ganas. Intento adivinar el calor de cada abrazo. Intento sentirme con todos. Adivino en todos la ternura. Igual que imagino aquello que nos hace iguales.
Camino a través de estelas que me llaman. Sueño con todos y conmigo. Ideo cuerpos, ideo caras. Y bailo al ritmo de todas las danzas.
A veces pienso que me equivoco. A veces no tengo a quien contarlo. Aunque a veces creo que no es necesario, que todos lo saben. A veces miro y me siento comprendido. A veces creo que el mundo me falla. Como a veces siento que estoy conectado con todos. A veces me siento observado por todos. A veces necesito que me observen. A veces soy y a veces no soy. A veces no quiero salir, y a veces lo que no quiero es entrar.
Tiempo de calor, del que todos necesitamos, y del que a veces nos quejamos.

martes, 27 de junio de 2006

Atrapando un sueño, así vivo soñando

Arrepentirse: De soñar lo que otros dicen
Son sueños de loco
Sueños en balde y en vano
Sueño imposible que no mereciera ni pensarle
No, no me arrepiento
De tener ilusión en la desesperanza
Esperanza en un imposible
Mi lucha en el desgarro
No, no me arrepiento
De creer en lo que nadie cree
De caminar contra corriente
De escribir mi propio destino
Explicando lo que, posiblemente, nadie más piensa
No, no me arrepiento
De cruzar un infierno
Por creer en mi destino
Por creer en la salida
Por creer en definitiva y sobre todo
En estar caminado en sentido correcto
No, no me arrepiento
De sentir y luchar por lo que siento
Luchar hasta el final pese a toda oposición
No, no me arrepiento
De mirarte a los ojos
Navegar tu mirada
Y saber para siempre
Que serás mi lucha amada
No, no me arrepiento
¿Y me preguntas si merece la pena?
Busca el metro que pueda medir el tamaño de mi voluntad
Busca el pensamiento que me falte para completarme
Busca la palabra que con sólo pronunciarla nos lo diga todo
Busca un verso que nos haga libres
Miguel Angel Báez

lunes, 26 de junio de 2006

A Miguel Angel le gustó mucho

"Dale limosna, mujer, que no hay en la vida nada como la pena de ser ciego
en Granada". Según reza la leyenda habita una ninfa en Granada, una ondina que
suspira por cada rincón de la Alhambra. Contó Irving que era rubia de tez de
armiño, muy blanca, y a la Sala de las Ninfas bajo la Sala de la Barca se
adentraba cada noche, el escritor, para escucharla y así relatar esos cuentos
que la ondina le narraba... susurro muy quedo, arrullo de hada... Ella es el
duende que a Dumas, en el mirador de Daraxa, le confió las palabras que dijo
Dios al crearla "Y Dios creo la Alhambra y Granada para cuando se cansara de su
morada" susurro muy quedo, arrullo de hada... Es esa niña de agua, Náyade de
ojos verdes a quien Bécquer le rimaba, la de aroma a azahar y yerba recién
cortada, pan de oro, su pelo lapislázuli, su mirada... Con jazmines y azucenas
la coqueta se engalana, entre líneas de arrayanes, allí esta la hija del agua.
Números y letras mozárabes, cuentos de duendes y hadas, mas esta mujer si que
existe Neptuno quiso engendrarla, que diera yo por quererla que no diera yo por
tocarla... y ella canta a lo lejos, las leyendas de la Alhambra... susurro muy
quedo, arrullo de hada... Esa mujer Nazarí, esa princesa y Sultana, es la mujer
que yo quiero, Ella es, mi Granada..

domingo, 25 de junio de 2006

Poesía

Si para recobrar lo recobrado debí perder primero lo perdido, si para
conseguir lo conseguido tuve que soportar lo soportado,
si para estar ahora
enamorado fue menester haber estado herido, tengo por bien sufrido lo sufrido,
tengo por bien llorado lo llorado.
Porque después de todo he comprobado que
no se goza bien de lo gozado sino después de haberlo padecido.
Porque
después de todo he comprendido por lo que el árbol tiene de florido vive de lo
que tiene
sepultado.
Francisco Luis Bernárdez

sábado, 24 de junio de 2006

Canción otoñal

Hoy siento en el corazón un vago temblor de estrellas, pero mi senda se
pierde en el alma de la niebla. La luz me troncha las alas y el dolor de mi
tristeza va mojando los recuerdos en la fuente de la idea. Todas las rosas son
blancas, tan blancas como mi pena, y no son las rosas blancas, que ha nevado
sobre ellas. Antes tuvieron el iris. También sobre el alma nieva. La nieve del
alma tiene copos de besos y escenas que se hundieron en la sombra o en la luz
del que las piensa. La nieve cae de las rosas, pero la del alma queda, y la
garra de los años hace un sudario con ellas. ¿Se deshelará la nieve cuando la
muerte nos lleva? ¿O después habrá otra nieve y otras rosas más perfectas? ¿Será
la paz con nosotros como Cristo nos enseña? ¿O nunca será posible la solución
del problema? ¿Y si el amor nos engaña? ¿Quién la vida nos alienta si el
crepúsculo nos hunde en la verdadera ciencia del Bien que quizá no exista, y del
Mal que late cerca? ¿Si la esperanza se apaga y la Babel se comienza, qué
antorcha iluminará los caminos en la Tierra? ¿Si el azul es un ensueño, qué será
de la inocencia? ¿Qué será del corazón si el Amor no tiene flechas? ¿Y si la
muerte es la muerte, qué será de los poetas y de las cosas dormidas que ya nadie
las recuerda? ¡Oh sol de las esperanzas! ¡Agua clara! ¡Luna nueva! ¡Corazones de
los niños!¡Almas rudas de las piedras! Hoy siento en el corazón un vago temblor
de estrellas y todas las rosas son tan blancas como mi pena.
Federico García Lorca

viernes, 23 de junio de 2006

Lluvia

La lluvia tiene un vago secreto de ternura, algo de soñolencia resignada y
amable, una música humilde se despierta con ella que hace vibrar el alma dormida
del paisaje. Es un besar azul que recibe la Tierra, el mito primitivo que vuelve
a realizarse. El contacto ya frío de cielo y tierra viejos con una mansedumbre
de atardecer constante. Es la aurora del fruto. La que nos trae las flores y nos
unge de espíritu santo de los mares. La que derrama vida sobre las sementeras y
en el alma tristeza de lo que no se sabe. La nostalgia terrible de una vida
perdida, el fatal sentimiento de haber nacido tarde, o la ilusión inquieta de un
mañana imposible con la inquietud cercana del color de la carne. El amor se
despierta en el gris de su ritmo, nuestro cielo interior tiene un triunfo de
sangre, pero nuestro optimismo se convierte en tristeza al contemplar las gotas
muertas en los cristales. Y son las gotas: ojos de infinito que miran al
infinito blanco que les sirvió de madre. Cada gota de lluvia tiembla en el
cristal turbio y le dejan divinas heridas de diamante. Son poetas del agua que
han visto y que meditan lo que la muchedumbre de los ríos no sabe. ¡Oh lluvia
silenciosa, sin tormentas ni vientos, lluvia mansa y serena de esquila y luz
suave, lluvia buena y pacifica que eres la verdadera, la que llorosa y triste
sobre las cosas caes! ¡Oh lluvia franciscana que llevas a tus gotas almas de
fuentes claras y humildes manantiales! Cuando sobre los campos desciendes
lentamente las rosas de mi pecho con tus sonidos abres. El canto primitivo que
dices al silencio y la historia sonora que cuentas al ramaje los comenta
llorando mi corazón desierto en un negro y profundo pentagrama sin clave. Mi
alma tiene tristeza de la lluvia serena, tristeza resignada de cosa
irrealizable, tengo en el horizonte un lucero encendido y el corazón me impide
que corra a contemplarte. ¡Oh lluvia silenciosa que los árboles aman y eres
sobre el piano dulzura emocionante; das al alma las mismas nieblas y resonancias
que pones en el alma dormida del paisaje!
Federico García Lorca

jueves, 22 de junio de 2006

Hojas de hierba

"Creo que una brizna de hierba no es
inferior a la jornada de los astros y que la hormiga no es menos perfecta ni lo
es un grano de arena... y que el escuerzo es una obra de arte para los gustos
más exigentes... y que la articulación más pequeña de mi mano es un escarnio
para todas las máquinas. Quédate conmigo este día y esta noche y poseerás el
origen de todos los poemas. Creo en ti alma mía, el otro que soy no debe
humillarse ante ti ni tú debes humillarte ante el otro. Retoza conmigo sobre la
hierba, quita el freno de tu garganta.(...) Creo que podría retornar y vivir con
los animales, son tan plácidos y autónomos. Me detengo y los observo largamente.
Ellos no se impacientan, ni se lamentan de su situación. No lloran sus pecados
en la oscuridad del cuarto. No me fastidian con sus discusiones sobre sus
deberes hacia Dios. Ninguno está descontento. Ninguno padece la manía de poseer
objetos. Ninguno se arrodilla ante otro ni ante los antepasados que vivieron
hace milenios. Ninguno es respetable o desdichado en toda la faz de la tierra.
Así me muestran su relación conmigo y yo la acepto.(...) No pregunto quién eres,
eso carece de importancia para mí. No puedes hacer ni ser más que aquello que yo
te inculco. "Y tú, mar... También a ti me entrego. Adivino lo que quieres
decirme,
Desde la playa veo tus dedos que me invitan,
Y pienso que no
quieres marcharte sin haberme besado. Debemos estar un rato juntos: me desnudo y
me llevas muy lejos de la costa,
Arrúllame y durmiendo al vaivén de tus
olas,
Salpícame de espuma enamorada, que yo sabré pagarte.
Mar violento,
tenaz y embravecido,
Mar de respiros profundos y revueltos,
Mar de la
sal de la vida, de sepulcros dispuestos aunque no estén cavados,
Rugiente
mar que, a capricho, generas tempestades o calmas,
También soy como tú: con
uno y muchos rostros
Partícipe del flujo y del reflujo, cantor soy de los
odios y de la dulce paz,
Cantor de los amantes que duermen abrazados
También doy testimonio del amor a mis prójimos: ¿Haré sólo inventario de
todos mis objetos olvidando la casa que los tiene y cobija? No soy sólo el poeta
de la bondad, acepto también serlo de lo inicuo y lo malvado,
¿Qué son esos
discursos que nos cuentan de vicios y virtudes? El mal me sugestiona, y lo mismo
la reforma del mal, mas sigo imperturbable. ¿Soy un inquisidor, un hombre que
desprecia cuanto encuentra a su paso? No soy más que aquel hombre que riega las
raíces de todo lo que crece. ¿Te temes que la terca preñez sólo engendre
tumores? ¿Pensabas que las leyes que rigen a los astros admiten ser cambiadas?
Encuentro el equilibrio en un lado lo mismo que en su opuesto. Las doctrinas
flexibles nos ayudan lo mismo que ayudan las más firmes,
Las ideas y
acciones del presente nos despiertan y mueven,
Ningún tiempo es más bueno
para mí que este ahora que me viene a lo largo de millones de siglos. No hay
nada de asombroso en las acciones buenas de antes o de ahora,
Lo asombroso
es que siempre existan los malvados o los hombres sin fe. Se borran el pasado y
el presente, pues ya los he colmado y vaciado,
Ahora me dispongo a cumplir
mi papel en el futuro.Tú, que me escuchas allá arriba: ¿Qué tienes que decirme?
Mírame de frente mientras siento el olor de la tarde, (Háblame con franqueza, no
te oyen y sólo estaré contigo unos momentos.) ¿Que yo me contradigo? Pues sí, me
contradigo. Y, ¿qué? (Yo soy inmenso, contengo multitudes.) Me dirijo a quienes
tengo cerca y aguardo en el umbral: ¿Quién ha acabado su trabajo del día? ¿Quién
terminó su cena? ¿Quién desea venirse a caminar conmigo? Os vais a hablar
después que me haya ido, cuando ya sea muy tarde para todo? Ya he dicho que el
alma no vale más que el cuerpo,
Y he dicho que el cuerpo no vale más que el
alma,
Y que nada, ni Dios, es más grande para uno que uno mismo,
Que
aquel que camina sin amor una legua siquiera, camina amortajado hacia su propio
funeral,
Que tú o yo, sin tener un centavo, podemos adquirir lo mejor de
este mundo,
Que el mirar de unos ojos o el guisante en su vaina confunden el
saber que los tiempos alcanzan,
Que no hay oficio ni profesión tan bajos que
el joven que los siga no pueda ser un héroe,
Que el objeto más frágil puede
servir de eje a todo el universo,
Y digo al hombre o mujer que me escucha:
"Que se eleve tu alma tranquila y sosegada ante un millón de mundos. "Y digo a
la humanidad: " No te inquietes por Dios,
Porque yo, que todo lo interrogo,
no dirijo mis preguntas a Dios,
(No hay palabras capaces de expresar mi
postura tranquila ante Dios y la muerte.)
Escucho y veo a Dios en cada cosa,
pero no le comprendo,
Ni entiendo que haya nada en el mundo que supere a mi
yo. ¿Por qué he de desear ver a Dios mejor de lo que ahora le veo? Veo algo de
Dios cada una de las horas del día, y cada minuto que contiene esas horas,
En el rostro de los hombres y mujeres, en mi rostro que refleja el espejo,
veo a Dios,
Encuentro cartas de Dios por las calles, todas ellas firmadas
con su nombre,
Y las dejo en su sitio, pues sé que donde vaya
Llegarán
otras cartas con igual prontitud".
Walt Whitman

miércoles, 21 de junio de 2006

Con el reflujo del océano de la vida

"(...) Mientras recorro las playas que no conozco mientras escucho la
endecha las voces de los hombres y mujeres náufragos mientras aspiro las brisas
impalpables que me asedian mientras el océano, tan misterioso se aproxima a mi
cada vez más yo no soy sino un insignificante madero abandonado por la resaca un
puñado de arena y hojas muertas y me confundo con las arenas y con los restos
del naufragio.Oh! desconcertado, frustrado, humillado hasta el polvo oprimido
por el peso de mi mismo pues me he atrevido a abrir la boca sabiendo ya que en
medio de esa verbosidad cuyos ecos oigo jamás he sospechado qué o quién soy a no
ser que, ante todos mis arrogantes poemas mi yo real esté de pie, impasible,
ileso, no revelado señero, apartado, escarneciéndome con señas y reverencias
burlonamente amables con carcajadas irónicas a cada una de las palabras que he
escrito indicando en silencio estos cantos y, luego, la arena en que asiento mis
pies. Ahora sé que nada he comprendido, ni el objeto más pequeño y qué ningún
hombre puede comprenderlo. La naturaleza está aquí a la vista del mar
aprovechándose de mí para golpearme y para herirme porque me he atrevido a abrir
la boca para cantar. He oído lo que decían los charlatanes sobre el principio y
el fin,
Pero yo no hablo del principio y del fin. Jamás hubo otro principio que el
de ahora, ni más juventud o vejez que las de ahora,
Y nunca habrá otra perfección que la de ahora,
Ni más cielo o infierno que éstos de ahora. Instinto, instinto, instinto.
Siempre el instinto procreando el mundo. Surgen de la sombra los iguales,
opuestos y complementarios, siempre sustancia y crecimiento, siempre sexo,
Siempre una red de identidades, siempre distinciones, siempre la vida
fecundada. De nada vale trabajar con primor; cultos e ignorantes lo saben.
Seguro como lo más seguro, enclavado con plomo en las columnas, abrazado al
poste firme,
Fuerte como un caballo, afectuoso, soberbio, ecléctico,
Yo y este misterio aquí estamos frente a frente. Limpia y tierna es mi
alma, y limpio y tierno es todo lo que no es mi alma,
Si falta uno de los dos, ambos faltan, y lo visible es prueba de lo
invisible,
Hasta que se vuelva invisible y haya de ser probado a su vez. Cada época ha
humillado a las otras enseñando lo mejor y desechando lo peor,
Y yo, como conozco la perfecta justeza y la eterna constancia de las
cosas,
No discuto, me callo, y me voy a bañarme para admirar mi cuerpo. Hermoso es
cada uno de mis órganos y de mis atributos, y los de todo hombre bello y
sano,
Ni una pulgada de mi cuerpo es despreciable, y ni una debe ser menos
conocida que las otras. Me siento satisfecho: miro, bailo, río, canto;
Cuando mi amante compañero de lecho, que ha dormido abrazado a mí toda la
noche, se va con paso quedo al despuntar el alba,
Dejándome cestas cubiertas con lienzos blancos que llenan con su abundancia
mi casa,
Yo las acepto con naturalidad, ¿pues habría de tasarlas hasta el último
céntimo para conocer exactamente el valor de su regalo? ¿Quién anda por ahí
anhelante, místico desnudo? ¿Cómo es que saco fuerzas de la carne que tomo? ¿Qué
es un hombre, realmente? ¿Qué soy yo? ¿Qué vosotros? Cuanto diga que es mío
deberás apropiártelo.
De otra forma, escucharme sería perder tu tiempo. No voy gimoteando a
través de la tierra: Que los meses se pasan, que la tierra es fangosa, miserable
y muy sucia. Gemidos y plegarias serviles son remedios para enfermos e inválidos;
quede el conformarse muy lejos de mi vida,
Yo me pongo el sombrero dentro y fuera de casa. ¿Por qué tengo que orar? ¿Y
adorar y andar con ceremonias? Después de escudriñar en los estratos, de
analizarlo todo, de hablar con los expertos y calcular minucias,
He llegado a saber que el sebo más sabroso va adherido a mis huesos. Me veo
en todos, ninguno es más que yo, ni es menos un grano de cebada. Sé que soy
fuerte y sano,
Todo marcha hacia mí, constantemente,
Todo me escribe y debo descifrar lo que me dice. Sé que soy inmortal. Sé
que mi órbita no podrá ser descrita con compás de artesano,
Que no me perderé como se apaga la espiral que en la sombra traza un niño
con fuego de un carbón encendido. Sé que soy venerable,
Y no fuerzo a mi espíritu a que explique o defienda,
Pues las leyes más fijas nunca piden disculpas (Después de todo no soy más
orgulloso que el cimiento que sustenta mi casa),
Existo como soy, con eso basta,
Y si nadie lo sabe me doy por satisfecho,
Lo mismo que si todos y uno a uno lo saben,
Hay un mundo al que tengo por el mayor de todos, que soy yo y que lo
sabe,
Si llego a mi destino, ya sea hoy ya sea dentro de millones de años,
Puedo aceptarlo ahora o seguir aguardando, con igual alegría. La base donde
apoyo mis pies es de granito,
Me río cuando dicen que puede disolverse,
Porque conozco lo que dura el tiempo".
Walt Whitman

martes, 20 de junio de 2006

Cosmos

"Quién contiene a la diversidad y es la Naturaleza
quién es la amplitud de la tierra y la rudeza y sexualidad de la tierra y
la gran caridad de la tierra, y también el equilibrio
quién no ha dirigido en vano su mirada por las ventanas de los ojos o cuyo
cerebro no ha dado en vano audiencia a sus mensajeros
quién contiene a los creyentes y a los incrédulos

quién es el amante más
majestuoso
quién, hombre o mujer, posee debidamente su trinidad de realismo de
espiritualidad y de lo estético o intelectual
quién después de haber considerado su cuerpo encuentra que todos sus
órganos y sus partes son buenos
quién, hombre o mujer, con la teoría de la tierra y de su cuerpo comprende
por sutiles analogías todas las otras teorías
la teoría de una ciudad, de un poema y de la vasta política de los
Estados
quién cree no sólo en nuestro globo con su sol y su luna sino en los otros
globos con sus soles y sus lunas
quién hombre o mujer, al construir su casa no para un día sino para la
eternidad ve a las razas, épocas, efemérides, generaciones. El pasado, el
futuro, morar allí, como el espacio indisolublemente juntos. "
Walt Whitman

lunes, 19 de junio de 2006

Lo que soy después de todo

¿Qué soy, después de todo, más que un niño complacido con el sonido de mi
propio nombre? Lo repito una y otra vez,
Me aparto para oírlo -y jamás me canso de escucharlo. También para ti tu
nombre: ¿Pensaste que en tu nombre no había otra cosa que más de dos o tres
inflexiones?
Walt Whitman


¿Y porqué he de sentirme complacido al oír mi nombre? Esto tampoco lo entiendo. Es difícil de entender a veces ciertas cosas. Y me da cosa no entender lo que quiso decir el amigo Walt. Walt, que tanto me llega. Que a veces me creo que sólo ha escrito para mi. Y de esto se me escapa algo importante que no logra llegar a mi entendimiento. Sin dudas no soy perfecto. Pero lo cierto es que no me complace para nada el sonido de mi nombre.

domingo, 18 de junio de 2006

No te detengas

No dejes que termine el día sin haber crecido un poco, sin haber sido
feliz, sin haber aumentado tus sueños. No te dejes vencer por el desaliento. No
permitas que nadie te quite el derecho a expresarte, que es casi un deber. No
abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario. No dejes de creer
que las palabras y las poesías sí pueden cambiar el mundo. Pase lo que pase
nuestra esencia está intacta. Somos seres llenos de pasión. La vida es desierto
y oasis. Nos derriba, nos lastima, nos enseña, nos convierte en protagonistas de
nuestra propia historia. Aunque el viento sople en contra, la poderosa obra
continúa: Tu puedes aportar una estrofa. No dejes nunca de soñar, porque en
sueños es libre el hombre. No caigas en el peor de los errores: el silencio. La
mayoría vive en un silencio espantoso. No te resignes. Huye. "Emito mis alaridos
por los techos de este mundo", dice el poeta. Valora la belleza de las cosas
simples. Se puede hacer bella poesía sobre pequeñas cosas, pero no podemos remar
en contra de nosotros mismos. Eso transforma la vida en un infierno. Disfruta
del pánico que te provoca tener la vida por delante. Vívela intensamente, sin
mediocridad. Piensa que en ti está el futuro y encara la tarea con orgullo y sin
miedo. Aprende de quienes puedan enseñarte. Las experiencias de quienes nos
precedieron de nuestros "poetas muertos", te ayudan a caminar por la vida
La sociedad de hoy somos nosotros: Los "poetas vivos". No permitas que la
vida te pase a ti sin que la vivas ...
Walt Whitman
Versión de: Leandro Wolfson

sábado, 17 de junio de 2006

¿Quimera?

Surgirá un nuevo orden y sus hombres serán los sacerdotes del hombre, y
cada hombre será su propio sacerdote.
Walt Whitman


Si, llegará el día en que el hombre no perderá la inocencia de la niñez y seguirá siendo él mismo durante todos los tiempos. Llegará el día en que se podrá crecer sin temor a sentirse rechazado por el resto. Llegará el día en que todos los padres se vuelquen hacia sus hijos y los eduquen en la seguridad de que jamás tendrán que mentir ni protegerse con falsas posturas. Llegará el día en el que todo el mundo muestre de manera natural su verdadero ser sin tener que dar explicaciones. Llegará el día en el que cada cual pueda desarrollar el mejor de sus potenciales sin necesidad de enfrentarse a nadie que se lo envidie. Llegará el día en el que se podrá confiar porque nadie querrá quitarte lo poco que has logrado. ¿Llegará ese día?

viernes, 16 de junio de 2006

Romance de la luna, luna

La luna vino a la fragua con su polisón de nardos. El niño la mira, mira. El
niño la está mirando. En el aire conmovido mueve la luna sus brazos y enseña,
lúbrica y pura, sus senos de duro estaño. Huye luna, luna, luna. Si vinieran los
gitanos, harían con tu corazón collares y anillos blancos. Niño, déjame que
baile. Cuando vengan los gitanos, te encontrarán sobre el yunque con los ojillos
cerrados. Huye luna, luna, luna, que ya siento sus caballos. Niño, déjame, no
pises mi blancor almidonado. El jinete se acercaba tocando el tambor del llano.
Dentro de la fragua el niño, tiene los ojos cerrados. Por el olivar venían,
bronce y sueño, los gitanos. Las cabezas levantadas y los ojos entornados. Cómo
canta la zumaya, ¡ay, cómo canta en el árbol! Por el cielo va la luna con un
niño de la mano. Dentro de la fragua lloran, dando gritos, los gitanos. El aire
la vela, vela. El aire la está velando.
Federico García Lorca

jueves, 15 de junio de 2006

Cable a tierra

Lonely rivers flow to the sea, to the sea
To the open arms of the sea, yaa
The Righteous Brothers


Y así iba, por el sendero solitario, dispuesto a chocar con el torrente. Iba dispuesto a perderme. Iba sin encontrar mi propio camino. Aparecieron varios que me tendieron la mano, y yo intentaba agarrarme, pero siempre algo fallaba. Siempre me volvía a caer y continuaba en mi tropiezo. Ahora he visto tu mano a lo lejos y a por ella voy. Voy frenando mi carrerilla y poniéndome justo en tu sentido. Cada día se acerca más y yo temo. Temo dar un tropiezo y quedarme sin ella. Temo mirar al frente y no ver tu mano. Temo que quede atrás y la pierda para siempre. De todas ellas la tuya es la que más brilla. De todas ellas la tuya es la que más me anima. De todas ellas.... si, es la tuya.

miércoles, 14 de junio de 2006

Ayer me pregunté

Ayer me pregunté que tanto he vivido... como es que olvide lo importante
que es vivir. Y hoy me di cuenta de que no he vivido lo suficiente... Que no ha
bastado todo lo que he vivido... para darme cuenta de todo lo que he sufrido.
Que me he olvidado de todo aquello que en este momento es mi prioridad... Que aun
no he sabido vivir... que no se vivir. Que me he ocupado tanto por cosas sin
importancia, como cuando me preocupe por nada, como cuando no supe valorar
muchos momentos importantes en mi vida y que no he sabido atraparlos en mi
memoria. Que recuerdo mas la ultima vez que lloré; que cuando reí,
Y ahora solo se que en algún momento deje que mi vida se esfumara... que
estoy dejando poco a poco se vaya extinguiendo y sin yo saberlo. Me he vuelto
tan insegura acaso ????????? Ahora no se en donde estoy o que debo hacer, tengo
tantas cosas y no son tan importantes vivo y no lo siento. Me he dado cuenta que
me he perdido de sentir; por no sufrir que me he perdido de reír; por no llorar,
sin darme cuenta de que al sonreír puedo ser feliz. No me he sabido valorar lo
suficiente, como para darme cuenta de que puedo hacer mucho por los demás
empezando por mi y tener la plena satisfacción de que soy un ser útil, que puedo
si me lo propongo y si así lo quiero puedo hacer maravillas por mi. Tuve la
oportunidad de agradecer a todos aquellos con los que he compartido momentos y
no lo he hecho... creo es el momento idóneo de hacerlo. Reflexionando pido
gracias a Dios por prestarme un cachito de vida, por regalarme a este mundo en
el cual vivo, a mi familia por estar siempre a mi lado; a mis amigos por estar
aun cuando no los necesito, a esa persona a la que quiero y amo tanto y que no
lo sabe... Gracias por existir , y por dejarme existir en sus vidas hoy me di
cuenta que no es tarde, que aun puedo cambiar y ser mejor que el tiempo de vida
no ha sido suficiente como para aprender a vivir y apreciar lo hermoso de esta
vida y que hoy tengo la oportunidad de ser y sentir. Que hoy puedo empezar
nuevamente a vivir... Gracias...
Colaboración de Glaze@nne

martes, 13 de junio de 2006

Ojos de Loto encontró esto

Habrás de luchar contra ti y tu precioso pasado,con penoso desencanto...
Habrás de llenarte de consejos y palabras ajenas, en precipitado vuelo... Y sin
embargo, te faltará la mejilla que ruborize la tuya y las manos sobre tu cabello
que teñían el brillo perdido
Prefería tu mirada sincera sobre mi rostro.
Habrás también de sentirte muy feliz y despreocupada frente a las carencias, sin
fantasmas al acecho ni negras flores esperándote... Habrás de ignorar tu
sensibilidad y usarás toda tu acidez latente, sobre la cresta empalagosa de
quien te propuso un rescate... Y no obstante ello, no podrás olvidar en
cualquier tarde lluviosa, que una vez, una mariposa insistente, se posó en tu
mano y acarició tu piel cansada. La visita preanunciada. Ahora desde lejos e
igualmente, prefería morir en tus brazos una vez, a morir miles en tus piernas.
Habrás de compartir nuevas risas y encantos desbordantes que todo infierno
secreto recreará como un mágico cine, sobre tu cabeza... Habrás de olvidarme en
los pocos papeles que te he dejado y en las cuantiosas horas en que te obsequié
mi hombro para tu llanto... Y sin embargo, no atinarás a buscar mi corazón como
tu tesoro aunque una vida te lleve; ni vendrás a rescatarme de una guerra,
unequívoco o mi vida errante. Con el tiempo ya pesado, supe que prefería la
distancia segura a tu próximo pero liviano reparo. Habrás de sentirte triste y
decepcionada, rodando como el viento que se esconde en los recovecos de un
barrio... Habrás de mandar al infierno a tu control y frente a un extraño que
tocará tu mejilla, soltarás la hebilla que recoge tu pelo... Y con los años, sin
embargo, te sentarás en una ventana de vista plomiza, a buscar la canción que
olvidaste y el abrazo cálido de quien espantaste. Hiciste una sombra de la luz
que tenías... Yo hubiera preferido a menudo, besar tu vientre y ver al sol salir
por ese horizonte. Habrás de desaprovechar tantas cosas... que también a mi, me
apena de veras. Confieso ya a mi altura, que tú no tendrás cambio y yo que
muchas veces ya me fui en silencio, pensaré que lo mejor de ti, siendo poco, ya
lo he apreciado. Dejaste la inocencia espiritual para competir con tu sombra.
Para ti, la caricia bien intencionada que tantas veces despreciaste o que
tomaste como previo sexo, es la única posibilidad de discernimiento que te da tu
mente en su orgullo. Habrás de no necesitar lo dulce de las flores y aquellas
que también, alguien te ha regalado... Habrás de olvidar con pronta ligereza y
también de alejar a quienes te contengan con impura simpleza, pensando que de
ti, sólo harían madera en vez de regar tu cerco, esperando tu grandeza... Y sin
embargo, otra vez, preferiría voltear mi cabeza. Han caído las formas y las
estrellas sobre el mar furioso. Ha caído tu última lágrima y tu última risa...
El cielo, al fin, se secó. Las postreras emociones que yo prefería llevarme de
ti, curiosamente, son ahora parte de mi reino. Prefería la suavidad de tus manos
y tu voz de ensueño. Prefería tantas cosas que sin remedio, yo ya no he
descubierto. Por tu salud, hubiera preferido no conocerte más. Porque te
olvidaré con facilidad, ya sólo eres un texto y en cambio tú, deberás ausentarte
constantemente de ti, para que yo no vuelva a tu mente con acierto. Prefería...
Prefería... Ya no prefiero... No te prefiero.

lunes, 12 de junio de 2006

Ex libris

Viví en la cara oculta de la luna,
equivocadamente hasta encontrarte.
Ana Belén


Mi vida no se dirigía hacia ningún sitio. Vivía inercialmente esperando que algo en el camino me golpeara y que me abriera los ojos. De repente apareciste en mi ventana y encendiste sin querer la luz de la esperanza. Ahora que te he visto solo te puedo decir que quisiera que esto nunca acabara. Ayer llegué a casa y no pasaron muchas horas antes de que no pudiera resistirme a llamarte para que nos pudieramos ver hoy. A veces se dice "te quiero" en vano, pero ya me doy cuenta de que si te digo que has ocupado algun sitiecito importante en mi te lo digo sabiendo que ahora, cuando no estás siento tu falta. Veremos que ocurre dentro de ti, en eso no puedo decidir, ya sabes que eres libre, yo ya no lo soy.

domingo, 11 de junio de 2006

Diálogo con la Tierra

"¿Por qué me golpeas, tirano minúsculo e ínfimo?, ¿No te doy
miel y leche para tus hijos?, ¿No recibes mi leña para tu fuego, mi lluvia,mi
agua, mi tierra para tus frutos, mi perfume y mi calor?... Tú sólo me das dolor,
destrucción y sufrimiento. Has cortado mi manto de vegetales variopintos que
aterciopelaban mi piel y enjuagaban las gotas de mi lluvia; has secado mis
entrañas, sacando mi negra sangre para tus alocados ingenios de velocidad y de
muerte; has golpeado severamente mi estabilidad gravitacional con tus petardos
atómicos y has puesto en peligro la gravitación de otras esferas próximas a
mí. Has absorbido mis mares de vida, cubriendo las aguas con un manto de sangre y
contaminación total. Has envenenado el poco aire que me quedaba para respirar, y
en oriente y occidente, en el norte y en el sur; el viento el agua y la lluvia,
trasladan las enfermedades golpeando a los indefensos retoños. Has extinguido las
especies más bellas de mi biológica conformación, para dar gusto a tu
bestialidad irracional. Has desestabilizado las colonias
microscópicas, produciendo una escala infinita de consecuencias irreparables.
Has dividido la tierra en parcelas y has puesto al hombre en reservas, separando
al rico del pobre, al negro del blanco, al tonto del listo. Has abandonado la
contemplación de mis amaneceres y ocasos para entregarte a la guerra, a la
especulación y a la violencia. Has sembrado mis campos y mis montes de drogas que
matan a mis niños; esos que a mí me gusta sentir pisándome y contemplándome en mi
flor, en mi día y en mi noche. Has establecido la ley de lo que debe vivir, y me
has quitado el poder de autoseleccionar, de auto limitar. Pretendes ser más vieja
que yo que cuento con millones de años. Has decidido recortarme y limitarme sin
que la supermente que me dirige pueda programar la transformación de las formas y
la integración de los dinamismos. Me has llenado de estiércol y de abonos
químicos envenenados, que convierten mi piel en un desierto estéril. Has fabricado
aparatos de muerte más destructivos que mis terremotos, mis tormentas, mis
tornados, y tu lista de muerte es una montaña formada de dolor y de injusticia,
de guerra y de odio. Has pintado la atmósfera de negro y los niños no pueden ver
las estrellas que por la noche me visitan y me recuerdan el papel de producir
para la economía universal.¡Querido hombre!, existen otros caminos de
entendimiento entre nosotros que tú no has comprendido. En esas sendas estoy yo,
repleta de diálogo, de comprensión, de enseñanzas, de entendimiento. Poseo
la memoria genética de ciento cincuenta billones de reacciones biológicas, físicas
y químicas, que te ofrezco y pongo a tu servicio. En mis archivos se encuentran
recopilados los fenómenos más maravillosos que ningún ojo humano haya podido
jamás escrutar. Sobre mis tierras, en mis montañas y en mis mares, han caminado
animales alucinantes, extraños e inimaginables. He hecho crecer en mí las plantas
que jamás habéis podido reproducir. Mi cielo ha mirado durante toda mi existencia
al universo que me contiene y he podido registrar las medidas, las posiciones y
las formas de los astros, de las estrellas y de las galaxias. Mis entrañas
contienen minerales y productos energéticos que podrían llevaros a una evolución
total devuestro patrón social y económico. Poseo la escuela de conocimiento más
vieja y sorprendente de la existencia y os ofrezco un milagro en cada animal, en
cada planta y en cada objeto o cosa que me cubre y me forma. Mis arcanos están
permanentemente abiertos a vuestra serena y armónica contemplación y sólo
necesitáis emprender las vías de acceso. ¿Cuáles son estos senderos?... son muy
sencillos de tomar, son muy fáciles de caminar; dirígete por el de la justicia,
por el de la paz y por el del amor, y allí, en cada esquina, en cada accidente, en
cada respiración y en cada pausa, está mi amor, mi tutela, mi conocimiento y mi
infinito cuidado.¡Hombre... hombre, no tardes! ¡Me muero poco a poco!
¡Tu arrogancia, tu frío, tu desamor secan mis praderas, anegan mis mares y apagan
el fuego de mi aire! ¡Hombre...hombre, no tardes... ! La Tierra somos todos, si la
dañas te dañas a ti mismo"
Nuevatlántida

sábado, 10 de junio de 2006

Tu risa mágica

Tu risa mágica, lo juro,
Golpea mi corazón, inquieta mi pecho,
Mi voz, cuando te veo de repente cerca,
Rehúsa salir.
Mi lengua se desintegra y un fuego delicado
Corre por mi carne; no veo cosa alguna
Con mis ojos, y todo lo que escucho en los oídos
Es un zumbido
El sudor me corre por el cuerpo, un estremecimiento
Se apodera de mí, y pálida como
La hiera moribunda, pienso que estoy cerca
De morir
Safo

viernes, 9 de junio de 2006

Enano que esperaba

Bring me to life.
I've been living a lie
There's nothing inside.
Bring me to life.
Evanescense


Y finalmente hoy estás mas cerca que nunca. Mañana será nuestro encuentro verdadero. Nadie ha tenido tanta fe a partir de un diálogo virtual. Han sido meses de intercambio de letras, de imágenes, de voces y música. Cualquiera que me haya oido se hubiera creído que estábamos juntos. Pero para mi es como si lo hubieras estado. Cada día has puesto un grano de esperanza. Has llegado y me has sacado del letargo, me has iluminado y finalmente has emprendido el viaje. Bienvenido, mi duendecillo.

jueves, 8 de junio de 2006

Necesito recuperarte como amiga

Sabes que hablando con vos yo me siento distinto
Como el niño perdido que encuentra el camino
Como el alma en pena que en su arrastre por el mundo con un intuirte, se
ilumina
Como almohadón en el que reposar un corazón dolorido que cansado dejó de
caminar
Como un aventurero olvidado en un laberinto sin final le llega la noche y
quiere echarse a descansar sobre húmeda tierra que le hace de cama y para
descansar, necesito tu voz, una luz, una señal que me diga que estás ahí,
escuchando las palabras desde el otro lado del hilo, el hilo que separa la
locura de la cordura y que une la
grandeza con la miseria
Miguel Angel Báez

A una nueva amiga en la red

A quien me presta su oído sin conocerme, a quien me escucha sin importar
los como, los porqué, a quien confieso historias que quizás a otro no contaría,
a quien consume su tiempo que no me pertenece, para quien su única recompensa es escuchar una buena historia, la esperanza es mía, de que al menos valga ese rato
que te ocupa, agradecido siempre, al oído al que contaría.
Miguel Angel Báez


Gracias a la red he conocido a personas muy interesantes. Hace un tiempo tenía poca fe en que este fuera un medio para conocer a personas que valen la pena. Pensaba que esas personas nunca llegarían a perder su tiempo buscando amigos por este medio. Ahora me doy cuenta de cuan equivocado estaba. Afortunadamente. A todos los que me leen en silencio, gracias.

martes, 6 de junio de 2006

Una tirita en el corazón

Pondré una tirita en tu corazón y otra en tu alma, y todo sanará cuando
encuentres a esa persona especial que te haga flotar como mariposa en primavera
lo sentirás, te sentirán, un amor explotará y llenará de luz tu esfera, esfera
de vida agraciada del amor y de la espera
Miguel Angel Báez


Constantemente me están poniendo tiritas en el corazón y en el alma. Pero ya todo está sanando, pues he encontrado a una persona especial que me hace flotar, no como una mariposa, pues yo nunca sabría flotar de esa manera, pero sí que me siento en el aire. Lo estoy sintiendo, pero no sé si estoy siendo capaz de hacer sentir algo parecido, es tan grande... Ojalá explote el amor y nuestro universo de llene de luz. Por supuesto, todo esto ocurre después de una larga espera. Tenían razón, hay que tener fe.

lunes, 5 de junio de 2006

A un soñador interminable

Tus sueños son mis sueños
Tu alegría mi alegría
Tu mente, la mía, transformada por la época
A ti que te lo debo todo, la vida
A ti que me cuidas como nadie, día a día
A ti que me das lectura para pensar
A ti que me das la vida en la vida, en mil sentidos
A ti que como yo sueñas otro mundo
Otro mundo si es posible
Afortunadamente nosotros nacimos en este
Hagamos realidad nuestros sueños
Miguel Angel Báez

domingo, 4 de junio de 2006

A ti, amigo

A ti, amigo, compañero de viaje al que siempre me encuentro el que siempre
me espera el que siempre me aguarda en la guantera cuando busco un camino y
tropiezo al que llamo para un problema, y siempre responde como responsabilidad
de vida adquirida sin mediar papel. Sin esperar nada a cambio, aun que haya sin
pensar en el "por que" o los "para que" necesito ayuda, sino simplemente a ti
eterno compañero del camino, eso es un amigo
Miguel Angel Báez


Yo me he encontrado con un amigo especial. Hace unos meses hemos emprendido un viaje juntos. Casi todos los días me creo que soy yo el que estoy esperando cuando descubro que es él el que espera. Lo tengo siempre en la mente y me hace sentir cosas que me alegran día a día. Ambos vamos guiando nuestro camino. A ti, amigo, gracias.

Estar solo

La soledad no es que no haya nadie. La soledad es ir
acompañado por la calle, ver algo que nos llama la atención y saber que uno no
puede comentarlo, porque al que viene al lado no le importa, o no escucha, o se
encoge de hombros, o mira y ni siquiera se encoge de hombros. La soledad es oír
que pasan por la radio aquella vieja melodía que nos eriza la piel y nos vuelve
de dieciocho años los recuerdos... salir corriendo para decirle: "Vení... vení a
escuchar..." y que él responda ya voy... y cuando llega al cuarto o a la cocina
o al living, allí donde lo espera tu corazón y tu impaciencia, el locutor esté
diciendo: "La melodía que acabamos de escuchar era..." La soledad es que él haya
regresado a casa, y en vez de quedarse con vos en la cocina mientras freís las
milanesas, se vaya a leer eldiario o a mirar el noticiero de T.V.Y es que se
olvide de que antes de irse a trabajar, a la mañana, quedaron en ir al cine por
la noche y al llegar por la noche se quite los zapatos, la corbata y el saco y
no mencione ni por casualidad la invitación. La soledad es estar esperando,
aunque el que esperemos esté junto a nosotros... junto, al lado... pero no CON
NOSOTROS. Oyéndonos, no escuchándonos. Mirándonos, pero no viéndonos. Estando...
no acompañando, ni participando, ni tratando de entender. La soledad es querer
gritar que aquí, dentro del pecho, se revuelve un dolor formado por silencios,
llantos disimulados, preguntas sin respuesta. Es que no podamos decir que nos va
mal, pero que tampoco podamos decir que hay una luz de entusiasmo y de ganas en
nuestra vida. Es RESIGNARSE. Que los demás lo vean a uno como apacible y dulce.
Que piensen que esa apariencia es producto de una maravillosa paz interior, de
una sabiduría que los años han ido dejando lujosamente en nuestro ser. La
soledad es empezar a decir: "Me da lo mismo", o : "No te preocupes...", cuando
quisiéramos gritar: "DEBE SER HOY Y AHORA", "QUIERO IR... QUIERO HACER... QUIERO
VER... QUIERO HABLAR": "Dios mío, quiero hablar." Hablar y hablar hasta decirlo
todo, hasta sacarnos de adentro todas las palabras que el miedo y la tristeza y
el desgano han ido amontonando y mutilando y nos pesan como si fueran bloques de
granito... La soledad es saber que la piedad de los demás no existe, que la
infelicidad les causa espanto y miedo porque temen que sea contagiosa... es
saber que para estar acompañados hay que bañarse, hay que peinarse bien,
vestirse cuidadosamente y parecer totalmente despreocupados y dichosos, sin
necesidades apremiantes, sin problemas... y sin que nadie, nadie se de cuenta
que estás solo.
Poldy Bird

sábado, 3 de junio de 2006

La amistad es un tesoro

Por una amiga una vez lloré y entonces llegué a comprender que valía la pena
llorar por querer.
Cuando algo tan profundo se une a una amistad,
te das cuenta de que el mundo es pequeño en realidad.
Te das cuenta que
amistad es tener un sentimiento, darse cuenta del error y compartir el
sufrimiento.
La amistad se esconde en la mirada, en la brisa del viento, en
la risa del amigo y en todo lo que siento.
Un amigo es un tesoro que profundo
has de guardar, pero no lleno de oro sino de verdadera
amistad.
(Dedicada a Mª Creu)
Montserrat Llauradó

jueves, 1 de junio de 2006

A la reina de los sueños y los cielos que toca los tejidos de mi corazón

Te necesito más que al sol para iluminar mis amaneceres
Con una de esas sonrisotas que pareciera tocar el mismo cielo
Cada diíta en que mi luz nace lo hace
Para llegarte a lo profundo del alma
Viviendo la ilusión de tocar tu piel otras mil veces
Y quedarme en ella para siempre
Para acariciarte el alma con una mirada que te llega a dentro
Donde sólo los ángeles vuelan
Donde sólo el viento juguetea con tus alas
Y el mar se mueve bailando al son de tu melodía de vida
Inspiración de luciérnaga que me iluminas en la oscuridad
De este sin sol que no acaba
Y que es cobijo de lo impensable
Aliento de lo insaciable
Esperanza de los desheredados
Quisiera que respirásemos el mismo aire en nuestra vida
Para sentir su sabor a cada sorbo
Sentarnos frente al lago
Mientras la tenue luz de una luna llena nos acaricia el rostro
Envidiosa de tanto amor, luna llena luna enamorada
Noche dorada de primavera
Lugar ingenuo de la inocencia de un niño sabio, donde habita
Corazón apedreado corazón guerrero
Corazón ardiente que te espera en un te quiero
Corazón que lucha así truenen siete cielos
Corazón para vivir todos los sueños que yo anhelo
Esta noche, pasión y cariño, deseo y ternura se unen para tocar tu
alma
Tan sólo abrázame, abrázame tan fuerte que duela
Desgarra los suspiros de mi alma
Que la cárcel de tus brazos es mi cielo
Y mi corazón es ese edén dorado en el que te espero
Miguel Angel Báez