lunes, 30 de octubre de 2006

Medidas

¿Cuánto mides? Mides la altura que puede alcanzar tu vista. Mides hasta el sitio que pueden apuntar tus dedos. Mides la estatura de tu libertad. Mides lo que tus pasos puedan abarcar. Mides la pureza al quitarte la ropa. Mides tu silencio. Mides la magia que te propongas. Mides la lágrima que te ahoga. Mides aquello que te alimenta. Mides hasta donde lleguen tus fuerzas. Mides la dirección de lo que deseas. Mides todo lo que admiras. Mides el descubrimiento de tu espíritu. Mides el cariño que aprecias. Mides cada uno de tus sacrificios. Mides lo que han esculpido tus manos. Mides lo que sientas por los niños. Mides lo que crees envidiar. Mides la dulzura de tus labios. Y tambien mides mi confianza. Mides mi espera. Mides mis noches de frío. Mides el dolor de mi alma. Mides mi sentimiento de culpa. Mides mi castigo. Mides mi llamada. Mides mis fiestas más íntimas. Mides todo lo que te debo. Mides mis sueños amargos. Mides todo lo que he tenido. Y mides todos mis despertares. Mides todo mi fuego. Mides toda mi ternura. Mides mis descubrimientos. Mides mi sed. Mides mis problemas. Mides mis días. Mides lo que doy. Mides lo que siento. ¿Te das cuenta de cuan virtuosa es tu pequeñez?

domingo, 29 de octubre de 2006

Receta universal

Estrellas, galaxias, universo. Movimiento perpetuo regido por reglas del infinito. Agua, viento, tierra. Universo palpable en movimiento. Moléculas, bacteria, yo. Puntos observables de un camino sin final, marcado por reglas universales.
Mente, alma, espíritu. Universos de dudas. Todo es fuente de inspiración.
Mezclando ideas de aquí y de allá me preparo un cóctel que sane la respiración. O sea, que purifique el aire contaminado. La receta que tengo a mano dice: polvo, pero... de estrellas? arena? de alas de mariposa? En fin, cualquiera debe valer. Luego dice: agua. Y venga! Artica o antártica? De lluvia o de nieve? De río o de mar? Bueno, pues la que se me ocurra. Ahora dice: Batir!!! Entiendo que se trata de provocar un vórtice... pero de galaxia? de huracán? o de recuerdos? Después hay que dejar enfriar, jajaja, a la luz de la luna? debajo de una cascada? en el fondo de una cueva? Debe dar lo mismo. Finalmente dice: Poner en reposo... no se si a la luz de una vela... o al calor del incienso... o bajo las caricias de los pétalos de una flor. Tantas variantes, simples, pero purificadoras... Ah! Hay una nota: Antes de beber, dar un toque de buena fe...

sábado, 28 de octubre de 2006

Energía creadora

Ella canta. Canciones con frases escogidas. La oigo y se me despierta el amor. Se me ilumina la vida de mil colores. Olvido aquellas manchas. Frases con su propia melodía. Frases de significado difícil. Frases que me hacen pensar. Frases que aparentemente hacen desconfiar. Pero son frases que descubren mi fragilidad. Melodías que ya me gustaría inspirar. Melodías y frases que alimentan mis raíces. Música y palabras que aseguran mi crecimiento. Coherencia muy difícil de traicionar. Ella sueña la música y busca las letras en el futuro. Ordena las notas y encaja el verbo en el sitio preciso. Así ella me cuida de la cordura. Así alimenta los mundos de mi alma. Y logra que finalmente mi vida tenga sentido. Me inventa tierras en el horizonte. Y sopla su viento contra las velas de mi barca. Simplemente ella, tierna y ligera. Hace su trabajo en la madrugada. Y antes de irse hace sonar la campana. Y yo abro los ojos ante la sonora caricia. Me levanto y ando por el camino trazado. Y busco los cofres que dejó olvidados. Los abro y me alimento. Ent0nces desembarco. Descanso en su cálida arena. Sonrío como aquel que terminó la espera. Se va poniendo el sol, su voz se va apagando. Enciendo una hoguera, y confío en su vuelta.

jueves, 26 de octubre de 2006

Madre

La canción aquí

Madre, en tu día
no dejamos de mandarte nuestro amor.
Madre, en tu
día
Con las vidas construimos tu canción.

Madre, que tu
nostalgia se vuelva el odio más feroz.
Madre, necesitamos de tu
arroz.
Madre, ya no estés triste, la primavera volverá,
Madre, con la
palabra libertad.
Madre, los que no estemos par cantarte esta
canción,
Madre, recuerda que fue por tu amor.

Madre, en tu
día,
madre patria, y madre revolución,
Madre, en tu día,
tus muchachos
barren minas de Hai Fon.

Silvio Rodríguez

martes, 24 de octubre de 2006

Como esperando abril

Mucho más
allá de mi ventana,
las nubes de la mañana
son
una flor
que le ha nacido a un tren.
Un reloj
se transforma en cangrejo
y la capa de un viejo
da
con una tempestad de comején.

Mucho más
allá de mi ventana
algodones jugaban
a ser un jardín
en espera de abril.

Luego entro los ojos
chorreando esa luz de infinito,
y es cuando necesito
un perro, un bastón, una mano, una fe.
Y tú pasas tocando
el frío con suave silencio
y, ciego, te sentencio
a que nombres todo lo que ahora no sé.

Mucho más
allá de mi ventana
mi esperanza jugaba
a una flor,
a un jardín,
como esperando abril.

Silvio Rodríguez

lunes, 23 de octubre de 2006

Lágrimas

No I can't forget this evening
Or your face as you were leaving
But I guess that's just the way
The story goes
Badfinger


Hay momentos en los que resulta imposible intentar la inspiración. Cuando la sed es tanta que no la pueden saciar infinitos oasis. Es cuando te das cuenta de tu necesidad de crecer, de perdonar, de comprender. Es la oportunidad que te da la vida para apreciar lo que tienes, por pequeño que te parezca. Es el momento de tener la seguridad de que la vida hay que vivirla sin detenerse un segundo para quejarse, pues el solo hecho de tenerla es el mas maravilloso de los regalos. Es la señal de que hay algo que nos une a ti y a mi, a nosotros. A todos.

domingo, 22 de octubre de 2006

Cuando ya no estás

La pequeña y el pequeño se sentaron a recordar. A conversar contigo. Mientras las nubes lloraban. Te llamaban. No sabían en que tiempo te encontrabas. Pero estaban seguros de que estabas al tanto. Recordaban momentos brillantes y segundos de atardecer. Se preguntaban cuanto habrías necesitado en los instantes oscuros. Y dudaban. Necesitaron que los tranquilizaras. Se tenían que conformar con tu silencio como respuesta. Pactaron seguir caminando. Y las nubes cesaron su llanto. No hacía falta oír la respuesta. Saben que es más importante lograr lo que esperas. Y entonces volverás. Los acariciarás levemente y reirán. Volverán a jugar los tres juntos. Y la luna tranquilizará a las nubes. El cielo volverá a ser azul. El mar perderá su gris. Los pequeños cantarán en esa mañana. Se levantarán. Para la eternidad. Y aunque no sepan donde estás, sentirán que te tienen a su lado. Quizás vuelvan a necesitar alguna respuesta. Y quizás no se conformen con el silencio. Pero saben que todo se resuelve con andar. Y entonces los volverás a acariciar. Sentirán otra vez tu brisa. Se sentirán de nuevo alentados por tu ola. Y los tres sonreirán.

sábado, 21 de octubre de 2006

Sendero

Al principio solo contaba con un amuleto. La cuarta dimensión marcaba los hitos... Me detengo en el camino y miro hacia atrás. Consulto la brújula. Y calculo las coordenadas. Determino a qué distancia me encuentro. Al final está la fuente. Saludo a los que regresan, vienen erguidos. Me acompaña el silencio. En el último punto me equipé de sosiego. En el anterior aprendí una canción. Y en el de más atrás adquirí el mapa. Desde entonces ya podía determinar el destino. Todo empezó en aquella laguna, la laguna del misterio. Una vez caí en la corriente del río. Todavía lo recuerdo. Aquellos tiempos de absoluta oscuridad. Cuando aún estaba en la cueva. Ahora me dirijo al sitio en que las preguntas tienen respuesta. Me podrán decir donde puedo plantar una rosa. Y retomaré la marcha con la brújula, el silencio, la quietud, la música y el mapa. No sé si es lo suficiente para evitar el derrumbe. Para evitarlo puedo pedirle a alguien que regresa una poesía. Para que me sostenga. Al menos ya puedo sobrevivir a la noche, se que me acompaña la luna. Grandiosa y venerable. Con su luz de esperanza. Qué suerte haberlo sabido. Plantaré mi rosa. Pétalos y espinas, también necesarios para poder llegar a las estrellas.

viernes, 20 de octubre de 2006

Me veo claramente

Me veo claramente
mascando un pedazo de hierba mojada.
Me veo claramente muy sucio y feliz.
Me veo descubriendo
descalzo un buen río de plantas ahogadas.
Me veo claramente lejano de aquí.

Me veo claramente
haciendo preguntas que ya conocía
con indiferencia ante el "ya crecerás".
Me veo claramente tan aventurero,
hecho un asesino de azúcar y pan.
Me veo claramente si miro detrás.

Me veo claramente
en la mano una noche, lugar de aprenderme
con miedo y paciencia lo que era el amor.
Me veo apretado al calor de unas piernas,
tragando del aire
un planeta tras otro, bañado en sudor.

Me veo semialzado
en la luz de esa hora, riéndole al techo,
riéndole a ella, riéndome a mí.
Me veo claramente tan digno de amantes
y breves países de felicidad.
Me veo claramente,
me veo claramente si miro detrás.

Me veo claramente
marchando a campañas de guerra entre todos
y yendo a otras guerras privadas también.
Me veo claramente
la primera noche con una guitarra
tan pálidamente como cuando fue la primera mujer.

Me veo tan atento a los ruidos internos
feliz tristemente
queriendo de veras ser mucho mejor.
Me veo claramente
buscando palabras que sepan dar vida y dar muerte al amor
me veo claramente
me veo si miro a mi alrededor.

Silvio Rodríguez

jueves, 19 de octubre de 2006

El dulce abismo

Amada,
supón que me voy lejos
tan lejos que olvidaré mi nombre.
Amada,
quizás soy otro hombre
más alto y menos viejo
que espera
por sí mismo allá lejos,
allá trepando el dulce abismo.

Amada,
supón que no hay remedio,
remedio es todo lo que intento.
Amada,
toma este pensamiento
colócalo en el centro de todo el egoísmo
y ve
que no hay ausencia para el dulce abismo.

Amada,
supón que en el
olvido
la noche me deja prisionero.
Amada,
habrá un lucero nuevo
que no estará vencido de luz y de optimismo
y habrá un sinfín latente
bajo el dulce abismo.

Amada,
la claridad me cerca.
Yo parto, tu
guardarás el huerto.
Amada,
regresaré despierto
otra mañana terca de
música y lirismo,
regresaré del sol que alumbra el dulce abismo.

Silvio Rodríguez

miércoles, 18 de octubre de 2006

Fin de la serie

Nunca se ha logrado nada sin entusiasmo
Emerson


Mayte trajo estas frases a Oasig. El oasis que con tanto entusiasmo creé. Un lugar para saciar mi sed y que me llevó al desierto que ya conocía. Esa visita contribuyó mucho a que yo esté aquí, ahora. El desierto es superable, siempre he encontrado el sitio que me da el agua suficiente para continuar. A pesar del desespero inicial, siempre he podido lograr las fuerzas necesarias para seguir adelante. Las fuerzas para entusiasmarme con algún plan que ideo. Y algunos planes han llegado a buen término. Sobre todo viéndolo desde la distancia. Desde la orilla del mar, disfruto del aire fresco y de repente miro a un lado y me encuentro un puerto. Y a buen puerto se llega, pero también de los puertos se parte. Ahora no se bien donde estoy. Pero tengo entusiasmo, eso significa que algún plan debo tenerme entre manos. Ya habrá tiempo para los aeropuertos.

martes, 17 de octubre de 2006

Vals del despertar

Somos dueños de nuestro destino. Somos capitanes de nuestra alma
Winston Churchill


La vida se apresta a una celebración. Sus dueños dan un paso adelante, se saludan. Se visten de largo. Escogen pareja, comienzan a danzar. Por pasillos eternos despliegan su compás. La conciencia se gradúa y empieza a caminar. Los colores se mezclan y dan lugar a la pureza. Se trata del delirio real. Las palomas vuelan presurosas. El río azul se arremolina y los peces hacen una rueda. De los árboles se desprende el aroma de la fiesta. Las formas adquieren imágenes caprichosas. Los que tienen hambre reciben su maná. Los tristes dibujan su alegría. Los enfermos tienen paz. Los sabios observan satisfechos. Los necios comienzan a pensar. Los viejos, los jóvenes y los niños. Un, dos , tres, un, dos, tres; giran en la rueda, giran sin parar. Por fin todos nos encontramos y volvemos a comenzar. Y madre Gaia sonríe, sonríe a todos los gaiar.

lunes, 16 de octubre de 2006

Eclipse mortal

Saber no es suficiente; tenemos que aplicarlo. Tener voluntad no es
suficiente: tenemos que implementarla.
Goethe


El robot memorístico se había pasado su vida entre capítulos de enciclopedia. Su caparazón blindado le permitía adentrarse en cualquier ambiente sin arriesgar nada. Se pasaba el tiempo complaciendo a los admiradores de distintos círculos. Y sus propósitos peligraron cuando llegó aquel niño de la linterna. El enano se empeñaba en averiguar lo que había debajo de esa coraza. Lo agobiaba con sus extrapolaciones. Y le llegó a resultar insoportable el pensamiento de que su anhelo se viniera abajo, por culpa de aquel bicho del diablo. Tanto fue así que le rompió la linterna. Pero solo logró sacarle un gemido de sorpresa. El niño no comprendía porqué el robot no querría sobrevivir al eclipse. Y pensativo fue a buscar otra fuente.

domingo, 15 de octubre de 2006

Nautilus

Los grandes espíritus siempre han tenido que luchar contra la oposición
feroz de mentes mediocres
Einstein


Hace muy poco te hablaba de escalones. Se trata de una escalera que nos lleva al cielo. Pero no es una escalera simple. Es una escalera de caracol. Pero no pienses que es totalmente ascendente como la escalera de los faros. En el cielo la luz es continua. Y precisamente el cielo se encuentra en el punto de equilibrio. Me han dicho que hay que tener fuerza para alcanzarlo. Y me aseguran que esa fuerza se puede lograr con altas dosis de humildad. A veces la sonrisa derrumba muros. Otras veces hay que esperar a que se abra una puerta. Y también habrá que tener en cuenta la posibilidad de caminos alternativos. Me dicen que no me preocupe por el tiempo. Y me han aconsejado que te diga todo esto. Por eso lo hago ahora, no sé donde estaré mañana.

sábado, 14 de octubre de 2006

Himno para despertar a un sordo

Nuestra gloria más grande no consiste en no haberse caido nunca, sino en
haberse levantado después de cada caída
Confucio


Dirige tu mirada a la luna. Con la cabeza bien alta puedes ver cada mancha. Si las cuentas verás que son muchas. A pesar de todo la luna brilla. Cuando no está el sol nos queda ella. Luz suficiente, para que encuentres el río. Corriente de esperanza que te llevará de vuelta a la alegría. Cuando llegue la mañana mírate en el espejo. Dirígelo hacia la luna, enséñale tu belleza, que se olvide de sus manchas. Recuerda siempre que otros necesitan encontrar el río. Luego puedes seguir con tu música. Pero ten cuidado, el sol a veces produce espejismos. Ya sabes de aquel que confundió molinos con gigantes. Si dudas ve y tócalos, comprueba que son reales. Evítale un disgusto a la luna, ella más que verte necesita manos que le pongan letra a su sinfonía.

El reparador de sueños

Siempre,
llega el enanito
con sus herramientas
de aflojar los odios
y apretar amores.
Siempre,
llega el enanito,
siempre oreja adentro
con afán risueño
de enmendar lo roto.
Siempre,
apartando piedras de aquí,
basura de allá, haciendo labor.
Siempre va esta personita feliz
trocando lo sucio en oro.
Siempre,
llega hasta el salón principal
donde está el motor que mueve la luz.
Y siempre allí hace su tarea mejor,
el reparador de sueños.
Siempre,
llega el enanito
hasta la persona,
hasta todo el pueblo,
hasta el universo.
Siempre,
llega el enanito
y desde esa hora
se acaba el silencio
y aparece el trino.
Silvio Rodríguez

jueves, 12 de octubre de 2006

Concierto para muchas manos

Voy por los mismos sitios y voy reparando en cosas que ya estaban. El puzzle va adquiriendo forma poco a poco. Me enseñas una alternativa y la forma se torna más bella. Intento darte las gracias, pero quizás no comprendas. Quizás no conoces del valor que tienen ciertas cosas para mi. En definitiva no sabemos de nuestra profundidad relativa. Lo cierto es que el tiempo que dedicas si que tiene un valor. Y yo quiero que comprendas lo que yo he comprendido, que el número del escalón no es lo que importa, lo que importa es que podamos escuchar nuestras voces. Y que es posible perdonarse el olvido por un tiempo, pero sería importante hacerlo semifuso. Yo quisiera observar tu puzzle, e intentar sugerirte otra posición para alguna otra pieza. Y volverte a oír. Y entonces mis sitios se ampliarían a tus sitios, y los tuyos... pues eso, a los míos. Y nuestros mundos podrían tener más luz. Y sus habitantes serían más bellos. Y las calles más limpias, y los árboles más frondosos, y los pájaros anidarían con más alegría. Y nuestros puzzles adquirirían otro color. Reflejando la nueva luz. Y tu en el tuyo... y yo en el mío... esperando a que un tercero, no importa de cual escalón, nos diga qué hacer con las nubes.

martes, 10 de octubre de 2006

Plural

Cuando se tiene sólo el amor a ofrecer a esos cuyo combate único es buscar
el día,
Cuando se tiene sólo el amor para trazar un camino y forzar el
destino a cada encrucijada
Brel


Cuento conmigo para acompañarte cada día. Es lo que tengo para ayudarte a seguir en esta batalla. Para que tenga sentido nuestro despertar. Recuerda siempre que tu eres yo y somos nosotros. Un plural abierto y sin fronteras. Donde tengan cabida todos aquellos que también sueñan. Donde me dejes estar a mi, a pesar de la diferencia. Donde puedas estar tu con toda tu belleza. Donde podamos estar todos compartiendo el mismo aire, sintiendo el mismo beso, respirando cada canción. Un sitio para nosotros, pleno.

lunes, 9 de octubre de 2006

Cuando seas, seré

Tu puedes ser dulce como una flor de primavera que regala su aroma y su
serena belleza a todos los seres humanos. Tu puedes ser fuerte como un mar
tempestuoso que en su vaivén incesante lleva una melodía de poder. Tu puedes ser
libre como un águila que remonta su vuelo entre las cimas más altas entregando
al mundo un mensaje de libertad. Tu puedes ser sereno como las aguas de un
cristalino lago que alivia la sed de los fatigados caminantes. Tu puedes ser
radiante como el sol, que entrega su maravillosa luz para que sea
posible la vida abundante.
¡Tu puedes ser lo más sublime que te propongas!
César Guzmán


Entonces me convertiré en abeja para probar tu néctar. Navegaré en ti embriagado de tu música. Flotaré tranquilo sobre tu rastro. Lavaré mi cara en tu pureza. Simplemente, me iluminaré de ti.

domingo, 8 de octubre de 2006

La gota de rocío

La gota de rocío
del cielo se cayó
y en ella el amor mío
la carita se lavó.
Pero era tan temprano
que no salía el sol
y se helaron las manos
y mejillas de mi amor.
Creí que las estrellas
la iban a buscar
y que en su cara bella
se ponían a jugar.
Me dijo:" tengo frío,
acércame calor"
y fui con tanto brío
que encendí su corazón.
Y mientras la besaba
me dijo en un temblor:
"esto es lo que faltaba
para que saliera el sol"
!Oh! gota de rocío
no dejes de caer
para que el amor mío
siempre me quiera tener.
Silvio Rodríguez

sábado, 7 de octubre de 2006

Hoy me acariciaste el alma

Me observas mientras pienso. Por momentos distraes tu mirada, estrategia calculada. Repaso miles de explicaciones. Me haces precisamente la pregunta que esperaba. Y viene la respuesta adecuada, la mentira disfrazada. Sabemos que la mentira no existe, sabemos que no es necesario, sabemos que los dioses nos han equipado para detectarla. Y sabemos perfectamente porqué lo quisieron así. Por eso te mantienes serena, y sonríes, te diviertes con mi jugada. La verdad es que todo está tan claro que lo demás solo es una pérdida de tiempo. Pero no nos cuesta nada permitirnos un descanso y jugar a las interrogaciones, a pesar de que no necesitamos de ese medio para comunicarnos. Y el tiempo pasa y seguimos en el juego. Y es que necesitábamos morirnos hoy, necesitábamos vernos y disfrutar de nuestra belleza mutua aunque sea por un momento. Hasta dejé que me acariciaras el alma, por decirlo de alguna manera, vamos. El oficio de príncipes nos consume y a veces es necesario simular una partida. Por cierto, cuando averigues a quien darle las gracias por el angel, no dejes de decírmelo, también de él necesitaba la mirada. Y sobre la muerte, pues nada, no existe, olvídala por ahora, es elemental. En fin, ya sabes que necesito que me acaricien el alma.

jueves, 5 de octubre de 2006

Eslabón

Mañana, aun no existe. Existes tu. Por eso ahora me ocupo de transformar el oxígeno que me alimenta en algo mínimo que te pueda servir. Y se que es difícil llegar a ser algo que minimamente sientas. Para ti son importantes las cosas sublimes. Cuidas el espacio por el que puede pasar una mariposa. Y fertilizas el desierto con el deseo, para cuando nazca la palmera. Y es que nunca has estado en el desierto, pero se que te importa. Preguntas al observador si ya repararon en el cráter donde está la llanura con el calor suficiente. Y consultas las noticias con la esperanza de que haya desaparecido el anuncio del unicornio que busca a su amo. Desde entonces llevas aquella pulsera azul. Ya ves, se mucho de ti y de mi no sabes apenas. Porque cuando te veo mis ojos brillan con tu pulsera. Y es ella la que me ha contado. Y lo que me ha contado me da mucha pena. No por la mariposa, ni por la palmera, ni siquiera por los futuros habitantes. Es por el unicornio. Me da pena porque no se si lo lograré. No se si algún día podré conseguir todos los elementos necesarios. Elementos para la magia que te haga reparar en mi. Porque solo entonces me permitirás decirte, que del unicornio... eres el único dueño.

miércoles, 4 de octubre de 2006

Hacia la capa más profunda

Eres humano. Con defectos y virtudes. Con dudas e imaginación. Que acepta y niega. Que ríe y llora. Como siempre, así eres. Humano. Con pasiones y desencantos. Con sabiduría y curiosidad. Que siente y padece. Con seguridades y miedos. Con cautela e impulsos. Con entregas y rechazos. Con cálculos y derroches.
Así eres. Creativo y convencional. Inconforme y austero. Aquí estás.
Pero podría ser que no fueras. Imperfecto. Infiel. Ausente. Necio. Pobre. Simple.
Pudieras ser. El amor. La fuerza. El conocimiento. La sinceridad. Lo necesario. El alimento. La inspiración. La paz. La diferencia.
De cualquier manera me gustaría ser tu. Para que me sostengas. Para que me levantes. Para que me des coraje. Para entender. Para querer. Para reír. Víctima del entusiasmo. Preso del atrevimiento. Torturado por el saber. Muerto por el crecimiento. Llorado por su iluminada presencia. Feliz por alcanzar casi nada.
Contento por descubrirte.

martes, 3 de octubre de 2006

Aprendiz

Entonces te inventé. No me resultó nada difícil lograrte. Me bastó con las alas. Y un pequeño intervalo robado de tu anhelo. También hizo falta un poquito de tu fe. Aunque tu silencio no me permitía saber si quedarías conforme. El resultado es todo lo limpio que pude. Intenté evitar la perfección. No me pidas que te diga cuanto material necesité. No usé nada de lo que no pudiera prescindir. A ti te dejo que descubras cómo puedes iluminarte. También te queda investigar tu propia dimensión. Deberás aprender a conservar lo aprendido, aunque te parezca una contradicción. Si algún día sientes dolor no sufras, recuerda que quise ahorrarte algunas cosas. Es que las heridas te darán aquello que no soy capaz de dar. Créeme que cuentas con lo suficiente. Aprendiendo este oficio fue que descubrí mis alas, ahora te toca a ti saber donde están las tuyas. Te digo que a mí no me resultó tan difícil. A pesar de lo que pueda parecer, o de lo que te cuenten. Recuerda que a mi me tienes por ahora, aprovecha mientras para consultarme. Pero no se si sabré darte una respuesta adecuada. La primera tarea es saber hasta donde puedes llegar sin encontrarte un "no". Se tarda tanto que yo aún no tengo la solución.

lunes, 2 de octubre de 2006

Yo soy como soy

A veces siento deseos de amor
y a menudo no puedo beber
para esa hora busqué una canción
con la que me entretengo la sed
tiene delirios de la tradición
y otras hierbas que suelo rumiar
ya te la voy a cantar

Yo soy como soy
y a casi todo el mundo le pedí prestado
Yo soy como soy
y a casi todo el mundo yo le tiendo mano

Dime que pena te puedo curar
yo quisiera también ser doctor
Solo deseo que para tu mal
tenga alivio mi vieja canción
Lo que te doy de mortal a mortal
se desprende gustoso de mi
el resto espera por ti

Sé que hay dolores que no curará
ni la mas esmerada canción
En todo caso te invito a llenar
de optimismo ese buen corazón
Vale la pena dejar de llorar
y hacer cita con el porvenir
Vale la pena vivir

Silvio Rodríguez

domingo, 1 de octubre de 2006

Tu fantasma

Me decido a tararearte todo lo que se te extraña
desde el siglo en que partiste hasta el largo día de hoy.
Me acompaño de guitarra porque yo no se de cartas
y además ya tú conoces que ella va donde yo voy.

Lo único que me consuela es que uso dos almohadas
y que ya no me torturo cuando te hago trasnochar.
Otro alivio es que en su árbol los pajaritos del alba
siguen ensayando el coro con que te bienvenirán.

El teléfono persiste en coleccionar absurdos.
Embromarme sigue siendo un deporte universal
y la puerta está comida donde la ha golpeado el mundo,
cuando menos una buena parte de la humanidad.

El cine de enamorados tuvo un par de buenas pistas.
Nuestro cabaret privado sigue activo por su bar.
Se nos sigue desangrando la llave de la cocina
y yo sigo sin canciones, habiendo necesidad.

Pueden ser casualidades u otras rarezas que pasan
pero donde quiera que ando todo me conduce a ti.
Especialmente la casa me resulta insoportable
cuando desde sus rincones te abalanzas sobre mi.

No exagero si te cuento que le hablo a tu fantasma,
que le solicito agua y hasta el buche de café.
En días graves le he pedido masajes para mi espalda.
Los peores ni te cuento porque no vas a creer.

Hay días que en tu sacrificio acaricio tu fantasma.
pero, ¿dónde iba el delirio?. No oigo tu respiración.
Siempre termino en lo mismo, asesino tu fantasma
y la diana me sorprende recostado en el balcón.

Ya no se si lo que digo realmente nos hace falta
hoy no es día inteligente y no sé ir mas allá
pero cuando puedas, vuelve, porque acecha tu fantasma
jugando a las escondidas y yo estoy muy viejo ya.

Silvio Rodríguez