miércoles, 19 de diciembre de 2007

Dolores

Todo lo que sucede, sucede por una razón

Gabriel García Márquez


¿Y donde estaba Dios cuando el holocausto? Es lo primero que me viene a la mente cuando leo este tipo de frases. Y ya no hablando de los desmanes que existen en este mundo y que ocurren en masa. Pensando en cosas que ocurren a nivel individual, ¿cual es la razón por la que alguien deba padecer una dura y larga enfermedad? ¿Porqué alguien tiene que vivir buena parte de su vida sumido en un profundo dolor? Hay quien no sabe del dolor, y hay quien se cree que ha sufrido lo suficiente. En cualquier caso se trata de una injusticia de Dios, que nos dice que amemos al prójimo como a nosotros mismos y le trae dolores a quien merece una cosa mejor. Yo amo al prójimo, lo que no se es si amo tanto a Dios.

lunes, 17 de diciembre de 2007

Destino

Encuéntrate y sé tú mismo; recuerda que no hay nadie como tú.

Dale Carnegie


Y es que el ser uno mismo cuesta tanto, trae tantos problemas... Hace unos meses interrumpí los posts de los Cuentos de Gaia, ¿porqué lo habré hecho? Pues lo hice por la "falta de audiencia"... resulta que con el tiempo el Blog ha llegado a tener más de 100 visitantes diarios, así que hoy decido retomarlo. Y lo retomo con un cuento sobre el destino, ese que vamos hilando y con el que se va conformando la trama de nuestra vida. No es bueno dejarse llevar por los demás, no es así que se debe hilar el destino. Hay que ser uno mismo, y entonces llegará el destino verdadero, el que sea, pero el auténtico.

lunes, 10 de diciembre de 2007

Libros

Nunca escribo mi nombre en los libros que compro hasta después de haberlos leído, porque sólo entonces puedo llamarlos míos.

Carlo Dossi


Y es que tengo tan pocos libros... Toda la vida no me alcanzaría para leer los que quisiera ya haberme leído. En otros tiempos, hace unos años, descendía por ciertas escaleras mecánicas pensando que en unos pocos meses iba a tener que abandonar aquel paraíso de libertad. Pensé que volvería al libro prestado, que iba de mano en mano y que llegaba a mi después de una larga espera. Pues no regresé, el paraíso sigue a mi alcance, lo que si he desperdiciado el tiempo en otras cosas... aunque nunca el tiempo es perdido... Aun puedo hacerlos míos.