martes, 31 de enero de 2006

Sonreir

Siempre dispuesto a ayudar. No me cuesta ningún trabajo. Vale la pena. Siempre ofreciéndome para lo que sea. Con cuidado de no cometer una intromisión. ¿Qué tipo de cosas son las que me mueven a ser así? ¿Será por puro entretenimiento? Tener un amigo así para mi sería un lujo, pero ya se sabe que no le puedo pedir tanto al mundo. Debo matizar mis esperanzas. Ya casi cumpliré 35 años. Y debo liberar peso de mis hombros. Es necesario para descubrir mi cara amable. Debo lucir mi verdadero color. Debo alcanzar mi propio peso. Debo alumbrarme con mi verdadera luz. Sé que seguiré siendo un bicho raro. Pero lo que busco se puede encontrar. Al menos algo similar. Debo seguir buscando en mí. Debo seguir caminando. Ir apartando poco a poco la desilusión. Debo volver a respirar. Todo porque no haya mas decepción. Poco a poco las cosas volverán a su sitio y yo encontraré por fin las cosas que necesito. Deseo verlo. Quizás la vida me de una sorpresa. Quizás algo nuevo esté por llegar. Y podré saborear lo que es la felicidad. Para ello es necesario sonreir. Debo dibujar con mi sonrisa la cara de los serios. Para así comenzar a soñar.

3 comentarios:

Vicente Torres dijo...

Seamos realistas, hay que pedir lo imposible.

Gaiar dijo...

Si, tienes razon, pero yo la verdad es que a veces pido mas de lo imposible.

el color del cristal dijo...

Eres como esperas que sean los demás, a lo mejor pides demasiado, o no, quien sabe.