Quizás tu memoria se ha lavado. Sin embargo, eso no ha pasado con la mía. Espero que yo nunca te llegue a olvidar. No creo que los dioses permitan que olvide a alguien como tú. Tu te sigues debatiendo entre lágrimas cuando hay tantas calles afuera, con tantos semáforos en verde. Ya sabes que todos los caminos van al mismo sitio. Solo tienes que levantarte y decidirte a caminar. Debes dejar que finalmente se evapore tu lágrima. Pero para ello debes exponerte a los rayos del sol. Debes dejar que su luz inunde tu cuerpo y penetre en lo profundo de tu herida. Se lo que es el sufrimiento, quizás no tanto como tu, pero sí lo suficiente como para hacerme una idea. Lo suficiente como para apreciar una mirada y entender lo que me dice. Lo suficiente para decidirme a levantarme e ir por el camino que me ha llevado a ti. Lo suficiente como para tener que renunciar a determinados sueños, pero al doblar la esquina volvérmelos a encontrar reverdecidos. Lo suficiente como para dar portazo y volver a comenzar. Debes mirarte al espejo y ver en ti lo que hasta ahora no has podido ver. No dejes que tu fuerza siga presa de tu miedo. Deja que tu fuerza ejerza y te lleve al sitio que en verdad te mereces. Hazlo por ti, por mi, por nosotros... por todos.
3 comentarios:
Ah Flor, que bueno que apareces!!!
Tan lindo Gaiar :) Textos como este, hacen que los lea una y otra vez HERMOSOS COMO SIEMPRE, dulces, frescos
Un gran beso desde este lado del planeta :) :*
Loren gracias, muchas gracias por tu amor :)
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