viernes, 26 de mayo de 2006

Favores y Abraham

Aceptar un favor de un amigo es hacerle otro.
John Collins


Ahora si. Cuando hacemos un favor y nos lo aceptan, sentimos una satisfacción tremenda. Cuando es a un amigo, pues más. Hay amigos que cuando la pasan mal no nos llaman para no molestarnos, no comprenden que es un gusto tener la oportunidad de hacer algo por ellos, aunque nunca deseamos que estén mal. Hoy un amigo me hizo reflexionar sobre mis comentarios de ayer. Quizás fui un poco duro con Abraham, pero es cierto, como se dice en la Biblia, no recuerdo bien, pero algo asi como que cuando te dan por una mejilla que pongas la otra. Bueno, hay que ver que no estoy hecho de esa madera. Al menos el impulso me lo impide, aunque razonadas las cosas es bueno seguir el consejo. Lo cierto es que nunca se sabe las vueltas que da la vida y quien es enemigo hoy quizás mañana se revele como un buen amigo.

1 comentario:

Vicente Torres dijo...

Eso es lo que ocurre Gaiar, la vida da vueltas y no se debe guardar rencor. Simplemente, hay que guardar los hechos en la memoria, pero para no tropezar de nuevo. Si no hay peligro de tropiezo, se le puede hacer caso a Abraham.