Mi color preferido es el azul, aunque es el verde el que me queda mejor. Ya hablé del color azul en otro momento, pero quiero retomarlo. En tiempos delirantes se me ocurrió que los colores eran un invento y que las personas se dividían según un color, en esos momentos las cosas mas hermosas que veía eran azules. Así que a mí el azul de alguna manera me alimenta. Dicen que los colores pueden estimular el estado de ánimo, yo creo que es verdad. Azules son tus ojos, y azul es mi esperanza. Nací en una isla rodeada por el mar azul. El planeta tierra es azul. La línea de metro que más cojo es la azul. El verde es el otro color que más me gusta, mis ojos a veces son verdes, iguales a los de mi madre. Verdes son los ojos de otra persona a la que quiero mucho. Y el mar a veces es verde. El rojo es un color demasiado fuerte, aunque a veces resulta bonito contemplarlo, pero otras veces es demasiado notorio, llama mucho la atención. Pero no niego que mi pasión es roja. Pasión roja que puede llegar a límites insospechados. A veces mis emociones se tornan de ese color. Pero rojos veo también a los líderes, y ya de líder no tengo ni pizca. Naranjas son las naranjas, mejor las de mi tierra que las de Valencia, aunque hay quien no me cree. Y quedan entre otros el amarillo, el índigo, el violeta, el rosa, el oro, la plata, el bronce, el cobre, el titanio... se me fue la olla!
1 comentario:
Claro que te creo, si tú has comido naranjas de ambos sitios, ¿por qué no habría de hacerlo?
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