domingo, 15 de mayo de 2011
Máximo aprovechamiento
lunes, 2 de mayo de 2011
domingo, 28 de marzo de 2010
Recuento
jueves, 25 de marzo de 2010
El pintor de las mujeres soles
El pintor de las mujeres-soles
abandonado en su empecinada claridad,
hizo su último viaje ya muy solo
sobre el Atlántico
y fue sepultado cuando llegó.
El pintor brilloso como la luna,
con su pelo largo, con su barba culta de polvo
escupió al cangrejo desde un dibujo
y le puso fecha a su despedida.
Y siguió queriendo
aunque no fue amado ni como ser humano.
Y siguió aprendiendo
el camino de la soledad en todo momento.
Y se fue entre ceras alucinantes
con su pelo largo, con su barba culta de polvo.
Descargando gritos sobre las almas
mientras los beatos se persignaban.
Y él no tuvo iglesias,
pero algo de altares al amor
hubo entre sus lienzos.
Y en la fantasía iba platicando
su viaje hacia el universo.
El pintor de las enredaderas de luz
escribió sus últimos signos
con triste desesperación.
Y dejó sus restos a los amigos
pidiéndole sólo paredes para sostenerlos.
Silvio Rodríguez
sábado, 23 de enero de 2010
miércoles, 30 de diciembre de 2009
Son de negros en Cuba
Cuando llegue la luna iré a Santiago de Cuba,
iré a Santiago,
en un coche de agua negra
iré a Santiago.
Cantarán los techos de palmera,
iré a Santiago.
Cuando la palma quiere ser cigüeña,
iré a Santiago
y cuando quiere ser medusa el plátano,
iré a Santiago.
Iré a Santiago
con la rubia cabeza de Fonseca.
Iré a Santiago.
Y con el rosa de Romeo y Julieta
iré a Santiago.
¡Oh Cuba! ¡Oh ritmo de semillas secas!
Iré a Santiago.
¡Oh cintura caliente y gota de madera!
Iré a Santiago.
¡Arpa de troncos vivos. Caimán. Flor de tabaco!
Iré a Santiago.
Siempre he dicho que yo iría a Santiago
en un coche de agua negra.
Iré a Santiago.
Mi coral en la tiniebla,
iré a Santiago.
El mar ahogado en la arena,
iré a Santiago,
calor blanco, fruta muerta,
iré a Santiago.
¡Oh bovino frescor de cañaveral!
¡Oh Cuba! ¡Oh curva de suspiro y barro!
Iré a Santiago.
Federico García Lorca
domingo, 1 de marzo de 2009
Sobre la muerte
¿Qué es la vida? Un frenesí.
Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.
Pedro Calderón de la Barca
Fernando Savater dice que los creyentes veneran a Dios para aminorar su preocupación por la muerte, y poder disfrutar mejor o peor de la vida. Visto de esta manera parece que la preocupación por la muerte se puede resolver creyendo en Dios. Entonces sería normal asumir que los que no creen en Dios saben que no hay vida después de la muerte. Pero el problema no me parece tan simple, pues quizás no tendría tan claro cómo demostrar, ya que no creo en Dios omnipotente y todopoderoso, que no hay vida después de la muerte, solo son un conjunto de intuiciones las que me llevan a esa conclusión.
Ken Ham, creacionista australiano dice que “La Biblia enseña claramente que cuando Dios creó a Adán y Eva el mundo era perfecto. No había muerte ni derramamiento de sangre. Pero por el pecado de Adán Dios trajo la muerte como juicio del mundo… Si crees en la evolución has de creer que Dios usó muerte y derramamiento de sangre a través de los siglos, durante millones de años, como medio para crear al ser humano. Esto destruye el mensaje del evangelio. La respuesta está en el Génesis – no hay lugar para la evolución en la Biblia”.
Esta frase conduce por buenos derroteros, pues creyendo en la teoría de Darwin sobre el origen y evolución de las especies, la existencia de vida después de la muerte sería por igual para seres humanos que para el resto de las especies, no hay nada que indique que en ese sentido otro ser sea diferente al hombre. Si el desarrollo de nuestro cerebro es producto de la evolución, como estoy seguro que es, entonces no creo que el ser humano se libre de la ley que aplicamos al resto de los seres mortales. Con perdón de los creyentes.